
Este finde semana he dado un paseo por Lisboa y es que ahora vivo muy cerquita. Tenía que visitar a una amiga que hacia tiempo no veia y hacer un parón para encontrar el punto de apoyo con el que mover el mundo p.nitas*. Aprovechando la diferencia horaria, decidí madrugar para sacar el máximo partido al día. Mientras en Mallorca la infanta se tapaba la boca con billetes, yo caminaba hacia el Museo da Electricidade para ver la exposición ILUSTRARTE; la VI Bienal Internacional de Ilustración para la Infancia. En el camino me encontré con varios graffitis de nivel y calidad. Y de todos, fue esta frase que veis en la foto la que me gustaría pudiera leer nuestra infanta:
«Governados por políticos corruptos às ordens da banca e dos grandes grupos econômicos, apoiados por uma juventude ignorante que sabe tudo sem querer saber de nada, é o nosso Portugal, rumo ao abismo»
La Cristi, la pobre, que no se entera de nada… igual que la «juventud ignorante» portuguesa. ¿Y quién soy yo para culparla? Ella es un ser superior, proviene de un linaje con superpoderes divinos y nada ni nadie puede luchar contra el designio de dios, de la banca, de las multinacionales, de la corrupción en la casa real. O eso es lo que nos han dicho.
Siempre esta relación de superioridad, que va más allá de nuestra monarquía y nosotros los súbditos. Podemos observarla también entre España y Portugal, entre éstas y sus colonias. Entre el primer, segundo, tercero y cuarto mundo. Son relaciones normalizadas y minadas, están por todas partes, como escalones invisibles que dividen la humanidad. Tejidos del desencanto común a través de la historia, alrededor de la faz de la tierra.
Yo no soy inmune a la justicia como lo es la infantíssima, está claro. Y hay otra cuestión que está clara y hay que puntualizar, IMPORTANTÍSIMO! Portugal, quizás sea más atrasada, más pobre y más pequeña que España… Pero, ¿os habeis fijado? SON UNA REPÚBLICA!!, aquí al ladito. Así es, nuestros vecinos empobrecidos, como nosotros, presos de la deuda, como nosotros, alcantarilla de Europa, igual que nosotros, desde el 6 de octubre de 1910 tienen una república. La monarquía portuguesa, que había comenzado en 1139 terminó 771 años después. 771 años de monarquía son demasiados años de monarquía, ni en que sea por la gracia de Bjork…
¿Que símbolo puede haber más retrogrado que el de una Monarquía que debe su privilegio al designio divino?. Pues una infanta corrupta, que no sabe si 600.000 euros es mucho o poco, por ejemplo.
La española es la más antigua de las monarquías reinantes hoy en Europa y la segunda del mundo, después de la del Japón. Arrebuscando datos entre los que reconozco me pierdo con facilidad, encuentro que un tal Don Pelayo fue el primer monarca del reino de Asturias. Desde el año 714, reinó 23 años. Desde esa fecha, podemos contar 1300 años hasta hoy, me dan escalofríos…
Para que no parezca tanto, históricamente se considera, por lo general, que la monarquía española tiene su origen en 1493, tras la unión personal y dinástica entre Isabel I y Fernando II que tanto montan, montan tanto… Lo que me da qué pensar, ¿Podríamos decir que Isabel era pro-derechos de la mujer? ¿Acaso se trataba de la primera reina feminista? Tal vez, pero, en todo caso lo hubiera sido sólo para las cristianas… Son 521 años, desde la santa unión, aunque ya llevase la península un sinfín de reyes divinos que tenían más cara que espalda, igualito que los de ahora. Divina monarquía pues, interrumpida únicamente en los períodos de la Primera República (1873–1874), la Segunda República (1931–1939) y el régimen franquista (1939–1975) Intentarse, se ha intentado, pero entre las cosas que nos hemos comido por intentarlo, una guerra injusta y dolorosa, una dictadura que colea hasta hoy mismo.
Mientras tanto, en Lisboa un muro dice: «Juventud ignorante que sabe todo sin querer saber de nada» hablando sobre la cantidad de información a la que tenemos acceso en la red y lo fácil que es ponerse a ver vídeos de gatos. Y este «Abismo» es el mismo abismo para todos, España o Portugal, primer, segundo, tercer o cuarto mundo. No distingue de nacionalidades, razas, ideologías. No tiene que ver con el nivel de educación, estamos en la era de Licenciados-camareros-limpia-wateres, embajadores españoles de la precariedad laboral por el mundo. Esa banca omnipotente, es la misma en todas partes y juventude y juventud, también es lo mismo en Portugal, Mozambique, Angola, Cabo Verde, Brasil o donde quiera que vayamos. Y es que «La economía global constituye, junto al pensamiento único, la quintaesencia del patriarcado». Victoria Sendón de León.
Me encanta Portugal y reconozco que hay muchas cosas en las que son geniales estos portugueses y no sólo en sus infinitas formas de cocinar el bacalao o en la gran delicia en forma de Pasteis de Belem. Pasar un par de días en el país vecino, con la mejor compañía posible, teniendo como telón de fondo numerosos graffitis, puede ser muy inspirador. Más si lo haces mientras la infantíssima sonríe, tras hacer el paseíllo hacia el juzgado en coche, a 300 metros de los allí presentes. En Lisboa no pueden pintar graffitis sobre su infanta, porque no tienen. Pero sería genial si se animasen y pintasen sobre la nuestra. Lisboa está plagada de Graffiti en esencia, reivindicativo, consciente de su realidad social. Hacía tiempo que no veía tano graffiti junto. Tengo que dar las gracias a GAU, Galeria de Arte Urbana de Calçada da Glória, que hace que sea más ameno subir la cuesta, entre vallas de pintura fresca, con iluminación propia, entrando en el Barrio Alto. Te sale de ojo viniendo de Barcelona, donde esta más prohibido pintar graffiti que nunca, a no ser que te patrocine algo o alguien, marcas principalmente. Entre estos muros me acordé del reciente evento con el que el ayuntamiento de Málaga ha tratado de lavarse la cara, usando la pintura mural de OBEY entre otros. El mítico OBEY obedeciendo y cambiando la palabra «JUSTICIA» por «libertad» que es menos comprometido que desear o pedir «justicia». Recomiendo leer artículo abajo linkado sobre el tema.
Celebro que a pesar de los pesares, en Portugal existan revolucionarios ecos de su revolución y que un graffiti pueda seguir reflejando una era en 6 metros cuadrados de muro. Paseando Lisboa quise imaginarme como pudo ser vivir allí el 25 de Abril del 74, La Revolución de los Claveles. Aquella fue una revolución mucho más que política. Los sucesos que tuvieron lugar en Portugal y su carga simbólica tras derrocar 48 años salazarismo, marcaron la historia de nuestro país vecino. Consiguieron que se desplomara la dictadura más larga de Europa. La situación del momento era de pobreza, desigualdad social, sinrazón de mantener una guerra colonial imposible, explotación latifundista, asilo de nazis huidos de la justicia o dictadores como Fulgencio Batista. Las cárceles estaban llenas de presos políticos contrarios al régimen, Portugal era un país aislado.
Hoy día hay pancartas contra la situación socioeconómica mundial en las calles de Lisboa. También me crucé con una manifestación de los trabajadores del metro. Algunos de ellos seguro vivieron aquella Revolución de los claveles, en la que no se derramó sangre y hubo un aspecto clave: la ciudadanía, lejos de quedarse en sus casas, como por seguridad se había recomendado en el transcurso de derrocamiento de la dictadura, llenó las bocas de fuego de los fusiles con claveles en vez del humo de la pólvora. La gente salió a llenar la calle de sonrisas, color, manifestándose y cantando «Grândola, vila morena». Qué me hubiera gustado viajar en el tiempo hasta aquel día… Pero mientras una dictadura caía otra comenzaba en Chile, una cruel etapa, salvaje y sangrienta, la horrible dictadura de Pinochet. A todo esto desde la vecina España, se miraba de reojo, el régimen tembloroso y miedoso de lo que era también, otra dictadura oxidada.
El ser humano combina con todas las atrocidades, equivocaciones y sandeces que comete a lo largo de su vida, a veces también momentos épicos e inolvidables. Hagamos que este momento histórico pertenezca al segundo grupo, empecemos desde nosotras mismas a derrocar el poder con el que dos de las instituciones más misóginas, la iglesia y el gobierno quiere decidir sobre incluso lo que pasa dentro de nuestros coños. Para perpetuar nuestro rol reproductivo para perpetuar su rol imperativo.
AQUI MANDO YO! Ilustradora p.nitas* El tren de la libertad. Marea Violeta.
Luchemos por la libertad, la justicia, la paz, conseguidas con tanto esfuerzo, y que tan rápidamente olvidamos que tenemos. Filosofía y educación, empezando por nosotras mismas. Celebremos victorias como las de Gamonal, levantándose contra la corrupción y el mamoneo o la de la Marea blanca de Madrid contra la privatización de la sanidad pública y sigamos luchando con nuestro grito, como motor del cambio social. «Nunca dudes que un pequeño grupo de ciudadanos pensantes y comprometidos pueden cambiar el mundo. De hecho, son los únicos que alguna vez lo han logrado». Margaret Mead
Defendamos nuestros derechos de forma que todos los que han luchado tanto, antes que nosotr@s, no lo hayan hecho en vano. Empecemos a entender que tod@s somos iguales, merecemos los mismos derechos, el mismo respeto y la misma libertad. Eduquémosnos y desde la educación eduquemos la vida, la integridad, la belleza. Aspectos tan frágiles, tan necesarios que merecen tanto respeto y mantenimiento.
Suprimamos los límites y hagamos desaparecer las relaciones de superioridad. Hagámoslo para que sea perenne.
¿Por dónde empezar a revisar y ser críticos prácticos con esta sociedad que nos rodea? Hasta hace poco nuestra alineación consistía en un fin, el significado de nuestra existencia ha sido producir-consumir, eso ya ni siquiera importa. Si no consumimos-producimos el capital sigue moviéndose a otras escalas, en otras esferas, así que ya deja de ser relevante nuestro papel de peones del sistema de consumo.
Juventude, ¿Tan difícil es cambiar estos hábitos que nos han metido en nuestras cabecitas minuciosamente desde incluso antes que supiéramos hablar correctamente?. Puede que sí lo sea, pero no es imposible.
Por momentos puedes escandalizarte por vislumbrar una conciencia generalizada en la que la hay quien, en lugar de estar indignada por el sistema y sus disfunciones, está cabreada porque éste no funciona tan bien como funcionaba hace 5 ó 6 años y no puede consumir al mismo ritmo que entonces. Necesitamos ser conscientes de que estamos viv@s y una revolución es posible. Y la libertad es posible y la Justicia es necesaria.
No creas que es más fácil resignarse y mirar como nos quitan derechos, como se promueven leyes en la educación que vuelven a poner obligatoria religión y optativa plástica. No podemos quedarnos pasivas ante la «Ley Mordaza» que no nos permitirá ni mostrar nuestro descontento en público ante por ejemplo el anteproyecto de la ley del aborto.
Neguémonos a que se nos siga recortando en sanidad, educación, en derechos de la mujer,… Paremos este naufragio hacia el retroceso, la solución no es esperar que se restituya por arte de magia en pocos años el estado de bienestar. Actuemos por construir un mundo más equilibrado, justo, culto, sano, valiente, no sólo por nosotras y nuestro bienestar si no por el de nuestr@s hij@s y los hij@s de nuestr@s hijos y así sucesivamente.
No sirve desentenderse, mirar para otro lado como hace la infanta mientras se llena la boca, los oídos y los ojos de billetes. Tenemos voz y tenemos voto, no podemos dejar que mande la pereza. Cada una de nosotr@s tiene que responsabilizarse del hecho de estar viv@ y ser partícipe del momento que le ha tocado vivir actuando para frenar la masacre socioeconómica de la banca y los grandes grupos económicos que nos gobiernan. No perpetuamos el sistema de clases, derroquemos la casta política, la banca y la monarquía chupóctera, inmune y grotesca, de una puta vez.
Expresémonos, participemos, dejémonos pensar y contrastar información sobre el mundo que nos rodea. Promovamos otras formas de consumo sostenibles y saludables.
Actuemos desde el individuo, haciéndonos preguntas, buscado respuestas. Participemos activamente en el entorno. Utilicemos la memoria y consciencia de un pasado un presente y futuro. Despertemos, abramos la mente a diferentes puntos de vista, participemos en el momento que nos ha tocado vivir.
Unámonos en un grito colectivo hacia nuestro futuro, porque p.nitas* somos tod@s.
p.nitas* desde las conversaciones entre Khanysa, Elena, Wendy, Paco e Inma. Lisboa 8 de Febrero 2014.
FUENTES:
Monarquía española, wikipedia.
Historia de Portugal. Wikipedia.
La revolución de los claveles. Youtube.
Margaret Mead. Wikipedia.
Victoria Sendón de León. Wikipedia.
Obey en Málaga. Rogelio Lopez Cuenca.